La principal implicada de la secta de Colliguay, Natalia Guerra se encuentra prófuga de la justicia, luego que, en un juicio abreviado, el Juzgado de Garantía de Quilpué la condenó a 5 años de cárcel efectiva por el delito de parricidio en grado de consumado en marzo pasado.
Según informó La Tercera, dos de los siete formalizados de la secta liderada por Ramón Castillo Gaete, quien se hacía llamar “Antares de la luz”, fueron sentenciados a penas efectivas de presidio por la muerte de un lactante que falleció calcinado por la comunidad en un rito que buscaba “evitar el fin del mundo” en el 2013.
Pese a que la condena fue ratificada por la Corte de Apelaciones, Guerra nunca se presentó ante la justicia para cumplirla y se encuentra hace 7 meses prófuga de la justicia.
Ante estos hechos, el juez titular del Juzgado de Garantía de Quilpué, Milenko Grbic, dictó una orden de detención contra Guerra y Pablo Undurraga – el segundo condenado con cárcel efectiva de la causa-, quien según informó el matutino, se presentó en el Complejo Penitenciario de Valparaíso para luego ser trasladado a la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago.
En Carabineros se informó a La Tercera que “la mujer se dio a la fuga y se mantiene prófuga de la justicia, por lo que hay una orden de detención nacional en su contra”, aunque la PDI afirmó que Guerra no ha abandonado el país.