Los diputados UDI Álvaro Carter y Cristián Moreira junto a la Confederación de Taxis Colectivos de Chile protestaron frente al Ministerio de Hacienda por las continuas alzas de los combustibles de las últimas semanas.
Además, en la manifestación entregaron una carta dirigida al ministro Felipe Larraín en la que, junto con expresar su preocupación por las constantes alzas en el precio de los combustibles, solicitaron terminar con el impuesto específico.
Paralelamente, el diputado de la Democracia Cristiana, Raúl Soto, y agrupaciones de taxis colectivos, también protestaron y exigieron al ministro Larraín revisar impuesto específico y cumplir con las demandas del sector.Tras la movilización en el centro de Santiago, el diputado Soto señaló que “estamos respaldando a la confederación de taxis y está no es sólo su demanda; es la demanda del pueblo de Chile, de la clase media de nuestro país. Estamos discutiendo hoy la reforma tributaria y el Gobierno tiene que abrirse a discutir este tema y si es necesario eliminar este polémico impuesto”.
“Esto ya es insostenible. El Mepco no ha funcionado. No sólo se le ha metido la mano en el bolsillo a la clase media, sino a los pequeños micro empresarios del transporte del país, particularmente a los taxis colectivos. La solución que se proponga debe ser consensuada con los actores sociales, con los dirigentes, sin ellos es imposible un acuerdo”, enfatizó.
Por su parte, la bancada del PPD, encabezada por Ricardo Celis, también expresó su preocupación por el alza consecutiva que ha tenido el precio de los combustibles, lo que ha afectado seriamente el bolsillo de los chilenos y chilenas.
“Lo que ha ocurrido durante estas últimas semanas respecto al precio de los combustibles ha puesto en evidencia que es necesario tomar medidas urgentes, como el fin del impuesto específico, principalmente ahora que nuestro país está comenzando el debate de la reforma tributaria”, sostuvo el diputado Celis.
El parlamentario indicó que “sabemos que este es un impuesto que reporta una recaudación muy alta y que es significativa para realizar beneficios sociales y políticas públicas que van en beneficio a la población, sin embargo, el gobierno no puede seguir recaudando cifras millonarias a costa de las personas que con esfuerzo han comprado su auto, que se transportan diariamente en la locomoción colectiva, o que trabajan en el transporte público”.
“Es una buena noticia, aunque un poco tardía, que el gobierno haya anunciado que está buscando alternativas para frenar estas alzas. Lo que nosotros le pedimos es que se ponga fin al impuesto específico y se busquen otras vías de recaudación fiscal, como por ejemplo, poner fin a las exenciones tributarias a grupos empresariales grandes, y a las personas más ricas y privilegiadas del país; y aumentar impuestos a las grasas saturadas, azúcares y otros que dañan la salud de las personas”, concluyó Celis.
