El Ejecutivo entregó sus argumentos al Tribunal Constitucional en defensa del proyecto que despenaliza la interrupción del embarazo en tres causales y negó que sea un primer paso para legalizar el aborto libre, según plantean los requerimientos presentados por parlamentarios de Chile Vamos.
Según informa hoy La Tercera, los argumentos están contenidos en un documento de 107 páginas con 20 conclusiones acerca de las razones del Ejecutivo para afirmar que el proyecto no transgrede las disposiciones de la Constitución.
El Ejecutivo afirma que los requerimientos hacen una “incorrecta interpretación del verdadero sentido del proyecto de ley” al plantear que se ha liberalizado la interrupción del embarazo o que se trata de “un primer paso” en esa dirección, ya que “la regla general sigue siendo la más absoluta prohibición de todo perjuicio al que está por nacer”.
De acuerdo a la información de La tercera, el Ejecutivo arguye que a la Constitución le asiste con respecto al embrión o feto “un deber de protección, no un derecho a la vida como el que asiste a las personas”, por lo que “no es absoluto o incondicionado”.
“El proyecto de ley pondera la vida del que está por nacer con los derechos de la mujer. Al legislador sí le está autorizado realizar un juicio de ponderación entre esta protección y otras finalidades constitucionalmente legítimas”, como lo sería “la protección y resguardo a los derechos de la mujer”. Esto estaría en línea con “los tratados de DD.HH. vigentes en Chile”, según la información consignada en el diario.
El documento agrega que “es desproporcionado” que “se prefiera en todo caso y bajo toda circunstancia la protección del feto antes que el reconocimiento del estatuto de persona autónoma y de dignidad de la mujer”. Asimismo, establece la garantía de que cada una de las tres causales debe acreditarse a través de diferentes medios técnicos, según la información de La Tercera.
