La vocera de Gobierno, Paula Narváez, se refirió a la polémica generada por el derrumbe de un muro en la población La Legua Emergencia, expresando que “se comprende la preocupación de los vecinos y vecinas”.
Asimismo, explicó que esta medida forma parte de un trabajo integral, en el marco de la intervención que se está realizando en ese sector para enfrentar la delincuencia, en un esfuerzo conjunto del gobierno regional, el municipio de San Joaquín y las organizaciones de vecinos.
La secretaria de Estado acotó que “una parte tiene que ver con poder derribar muros” para facilitar la labor policial, generando un trabajo preventivo y de enfrentamiento con las bandas criminales que allí operan.
Al mismo tiempo, sostuvo que se está trabajando en otros temas como el control de armas de fuego, fortalecer los vínculos con las organizaciones comunitarias y entre los vecinos y con los niños y niñas para que permanezcan en el sistema escolar.
Pasadas las 9:00 horas de este jueves y bajo un amplio operativo policial de seguridad, se dio inició a la demolición del polémico muro instalado en la población La Legua y que la separa de la villa Los Jardines en la comuna de San Joaquín.
El muro de concreto y ladrillos ha sido blanco de críticas, ya que mientras las autoridades indican que su destrucción facilitará el acceso de Carabineros y la PDI a fiscalizar la venta de drogas, los vecinos creen su ausencia empeorará su seguridad pues el muro servía como protección a las balaceras en la zona.
Según lo contemplado por las autoridades, los trabajos realizados por personal de la Municipalidad de San Joaquín incluyó diligencias en los pasajes Santa Elisa, Ñuño da Silva, Álvaro Sánchez y Karl Brunner.
Las labores de demolición se desarrollaron en medio de una amplia presencia policial, ya que hasta el lugar llegaron efectivos de GOPE, FF.EE, Tránsito, Radio Patrullas y de la Prefectura Aeropolicial.
