En entrevista con radio Cooperativa, expresó que todos estos hechos “van configurando una situación de desorden al interior de la institución que es particularmente peligrosa y difícil”.
Añadió que la venta de ilegal de armas “fue verdaderamente impactante” y “es una situación grave porque estamos ante un eventual ocultamiento y una cosa de esta gravedad ciertamente debe ser informada casi inmediatamente a la autoridad civil”.
Acerca del general Martínez, expresó que “no sabemos qué le informó o qué no le informó a las autoridades de Gobierno, pero da la impresión de que la información al menos no fue completa, toda vez que el ministro Espina ha solicitado al comandante en jefe a tener una reunión estos días”.
“Una situación de esta naturaleza es una situación extraordinariamente grave, y en consecuencia, debe ser advertida y comunicada a la autoridad” sin excepciones de “ninguna especie”, reiteró Allamand.
El senador analizó que “lo que está fallando, y hay que ponerle el cascabel al gato, es un conjunto de procedimientos internos de la institución, yo creo que lo que se requiere es una revisión global de protocolos, reglamentos, modos de actuar, incluso cultura institucional”.
En ese contexto, diagnosticó que “es lo mismo que ocurre con Carabineros”, marco en el que “se puede avanzar en un mayor control desde la autoridad civil a lo que ocurre en las instituciones armadas”.